Comodidad en la cama y excelente limpieza diaria.

Cerca del metro, pero habitaciones pequeñas

La ubicación es perfecta, a pocos minutos del metro y con acceso fácil a tiendas y restaurantes. El personal fue amable y nos permitieron dejar las maletas el último día.

La habitación era pequeña y un poco incómoda, con un baño algo complicado de usar. notamos que la limpieza era regular y hubo problemas con el desayuno.

Excelente ubicación y desayuno variado

La ubicación del hotel es inmejorable, con una parada de autobús justo en la puerta y el metro a solo diez minutos caminando. El desayuno era bastante completo, con opciones como zumos, café y una variedad de cereales. Además, la limpieza de la habitación fue un punto fuerte de nuestra estancia. Aunque el servicio en el comedor fue un poco rápido, el ambiente era agradable para comenzar el día.

Considera dejar tus maletas en el hotel y explorar las cercanías mientras esperas el check-in. Es una buena manera de aprovechar el tiempo.

La ubicación resulta conveniente, con dos paradas de metro a solo unos minutos y restaurantes cercanos, lo que facilita moverse por la ciudad.

Las habitaciones son pequeñas y necesitan renovación. además, el desayuno es limitado con poca variedad y calidad. En una de las habitaciones, la calefacción no funcionaba y la limpieza dejaba que desear, ya que las sábanas no se cambiaron en toda la estancia y el baño podía parecer poco higiénico. La entrada estaba llena de andamios y escombros, lo que añadia una sensación de caos al llegar.

Esto me ha dejado en shock

La experiencia fue increíblemente decepcionante. La recepcionista fue grosera y no aceptó mis peticiones razonables. Además, la habitación tenía problemas como una ducha sin puerta. La limpieza fue mediocre y el desayuno, aunque ok, no compensa el mal servicio. Definitivamente, un lugar que evitar en futuras visitas.

ubicación conveniente, habitaciones distribuidas en casas, acceso directo con llaves

Las habitaciones están en casas antiguas en reformación, y las vistas son todo andamios. La ducha tiene un diseño muy cuestionable y puede dejar el suelo del baño empapado. Una mejor insonorización sería ideal para evitar el ruido del tráfico!!!

La cama era cómoda, pero la ducha dejaba el baño empapado.

Durante mi estancia, me impresionó la limpieza de las instalaciones. La habitación, aunque pequeña, se mantenía en buen estado y era adecuada para descansar. Además, el personal fue sumamente amable, especialmente el conserje que estuvo dispuesto a ayudarnos en todo momento. La ubicación, a un corto paseo del metro, facilitó que pudiéramos visitar varias atracciones como el Museo de Ciencias y el Parque Holland. Sin embargo, el desayuno podría haber tenido algo más de variedad.

Este lugar me queda perfecto, tiene todo lo que necesito, wi-fi gratuito en las habitaciones, almacenamiento de equipaje, y un televisor de pantalla plana. En mi primera estancia, el personal me dio recomendaciones sobre comida para llevar, lo recordaré. Volveré por un par de días.

La habitación era espaciosa, con cuatro tomas USB, lo que facilitó cargar nuestros dispositivos. La calefacción funcionaba perfectamente y el cuarto de baño estaba limpio y reformado. Disfrutamos del desayuno continental que ofrecía opciones como cereales, zumo y galletas, un comienzo ideal para nuestras mañanas.

La ducha era fija y podría ser incómoda.

La habitación era pequeña, pero nueva y cómoda, además de contar con un frigorífico. El agua de la ducha salía por todas partes, así que el baño quedaba empapado después de cada duchada.

La habitación era un poco incómoda, la cama no era muy cómoda y el baño era bastante pequeño. Escuchamos mucho ruido de las tuberías, lo que resultó molesto. Además, la ducha no tenía puerta, y el suelo se empapó bastante. La tele estaba descolgada, dando un poco de miedo. Aunque estaba todo bastante limpio, algunas cosas estaban en mal estado y no funcionaban bien.

El hotel 65 me pareció una opción bastante asequible para mi viaje. La ubicación está bien, aunque no está en el centro, hay dos estaciones de metro a unos 15-20 minutos caminando. Los supermercados Sainsbury's y Tesco están justo ahí, lo que fue conveniente para comprar algo rápido. El desayuno era sencillo, con tostadas y cereales, y aunque no había mucha variedad, cumplía con lo necesario. Sin embargo, la habitación era un poco pequeña y algo anticuada. Además, noté que el baño era muy pequeño, lo que podía ser incómodo. La limpieza fue generalmente buena, pero el hecho de que me pidieran una fianza bastante alta al principio fue un poco sorprendente. No me gustó que no hubiera ascensor, ya que estaba en un segundo piso y eso complicaba llevar el equipaje. La atención de los recepcionistas fue buena, aunque el personal del comedor era un poco seco. A pesar de los problemas, probablemente consideraría volver por su relación calidad-precio y la ubicación.